Miércoles, 4 de noviembre de 1998
MADRID.- El presidente del Gobierno, José María Aznar, dio ayer un nuevo paso, trascendente y sin retorno, para el inicio de un proceso de paz, al anunciar oficialmente el inicio de contactos directos con miembros del entorno de ETA. Es decir, que a partir de ahora representantes del Gobierno se sentarán en una mesa con aquellos interlocutores que, a su vez, designe ETA.
En la comunicación oficial anunciando el movimiento del Gobierno, fuentes de La Moncloa utilizaron de forma inusual el término Movimiento de Liberación Nacional Vasco (MLNV), empleado siempre por el entorno de ETA, pero rechazado desde el Ejecutivo.
El Gobierno considera que tiene «la percepción de cambio en el MLNV y pretende dar una respuesta a sus intentos de aproximación».
Estas palabras se refieren a la valoración positiva que hace el Gobierno de la actitud de los dirigentes de la agrupación Euskal Herritarrok (EH) tras las elecciones del 25-O, admitiendo la voluntad de las urnas. También ha influido la demostración, tras 45 días de tregua, de que ETA controla la acción de los comandos y, salvo contadas excepciones, también ha sido capaz de hacerlo con los responsables de la violencia callejera.
La expresión «intentos de aproximación» se refiere a los mensajes del entorno de ETA que han llegado al Gobierno en los últimos días, a través de diversos intermediarios, mostrando interés en un alto el fuego permanente y en una salida dialogada. Entre estos contactos indirectos se incluye el oficioso mantenido entre un miembro del Cesid y un dirigente abertzale, del que informó ayer EL MUNDO...CLIK AQUÍ
En la comunicación oficial anunciando el movimiento del Gobierno, fuentes de La Moncloa utilizaron de forma inusual el término Movimiento de Liberación Nacional Vasco (MLNV), empleado siempre por el entorno de ETA, pero rechazado desde el Ejecutivo.
El Gobierno considera que tiene «la percepción de cambio en el MLNV y pretende dar una respuesta a sus intentos de aproximación».
Estas palabras se refieren a la valoración positiva que hace el Gobierno de la actitud de los dirigentes de la agrupación Euskal Herritarrok (EH) tras las elecciones del 25-O, admitiendo la voluntad de las urnas. También ha influido la demostración, tras 45 días de tregua, de que ETA controla la acción de los comandos y, salvo contadas excepciones, también ha sido capaz de hacerlo con los responsables de la violencia callejera.
La expresión «intentos de aproximación» se refiere a los mensajes del entorno de ETA que han llegado al Gobierno en los últimos días, a través de diversos intermediarios, mostrando interés en un alto el fuego permanente y en una salida dialogada. Entre estos contactos indirectos se incluye el oficioso mantenido entre un miembro del Cesid y un dirigente abertzale, del que informó ayer EL MUNDO...CLIK AQUÍ
